Emociones. "Amor-Odio"

  El amor como el odio, son emociones que se encuentran absolutamente relacionadas  entre si y se disponen a aparecen en un vinculo de manera proyectiva.

Sentimos odio o enojo justamente cuando amamos, el contrario a esto será la indiferencia, cuando amamos me duele cosas que el otro pueda hacer, generándome sensación de ira, de enojo.

El primer y más importante amor que debemos aprender a desarrollar es el propio, hacia uno mismo, el que nos otorga dignidad, esa que debemos defender durante nuestra vida, si esto no ocurre todo aquello que me pase será proyectado y manifestado  en alguien más, siendo ese alguien un espejo de lo no resuelto en mi vida.

El amor es o debería ser la emoción que arme cimientos, está presente en todo vínculo que se sostenga, es el motor del vínculo, toda demanda es demanda de amor, cada reclamo, cada control, en cada situación de celos, en cada enojo hay amor.

El temor a perder lo que amamos, en ocasiones, nos hace tener la intención de poseerlo, perdiendo ambos integrantes del vinculo la libertad, quedando esta atrapada en la posesión.  Como podemos poseer aquello que no es un objeto?, quien acompaña nuestras vidas no es de mi pertenencia, no puedo comprarlo, debiendo aprender a  respetar la historia, cultura y vivencia con las que viene.

Aceptar que el amor puede cambiar, en los vínculos de pareja, es una posición de crecimiento, no siendo esto permanente y lineal. Algo termina para que algo nuevo empiece, cerramos para poder abrir.

En nombre del  amor también debemos poner límites, aprender a decir NO o SI, según lo que estemos sintiendo, esto es sano, y el amor sano es el que construye, el que me eleva, el que nos da la posibilidad de crear. Destacamos que los lazos sanguíneos en el amor no implican incondicionalidad, no esta todo permitido por ser este un vinculo familiar, también requiere limites que no deberían transgredirse para poder continuar con respeto.

La bronca o la ira aparece cuando no puedo salir de lugares que no me gustan, cuando no puedo expresarle a alguien situaciones que me molestan o duelen, cuando esto que no puede salir a tiempo y hacia quien lo genero, se acumula en mí, saliendo en otro momento de modo impulsivo.

Identificar estas emociones y pensar porque y cuando aparecen nos ayuda a conocer su origen, de donde vienen, que raíces tienen.

Hablar de mis broncas puede restaurar o no vínculos, pero dejarlas adentro es dañino para nosotros, enferman, generan síntomas en el cuerpo, por esto es tan sano decir las cosas a tiempo y a quien corresponda, sabiendo de antemano que las respuesta que espero podrían no llegar, pero vendrá luego el camino de procesar y aceptar lo escuchado.

Ambas emociones son importantes en su medida justa, y por ambas debemos agradecer ya que vienen con un aprendizaje si podemos reconocerlo, para sostener o modificar situaciones y vínculos.